La víspera del cumpleaños de su única hija en junio de este año, Cecilia no tenía claro cómo haría para comprarle la torta, las golosinas y pasabocas para la fiesta. La niña daba por descontado que pasaría un día muy feliz junto a su grupo de amiguitas que la visitarían en su casa.

En vista de que el cheque que esperaba por un pago retrasado no llegaba y de que su esposo asumía todos los demás gastos de la casa, Cecilia decidió no preocuparlo y resolver ella el problema. En el cajón donde guarda su ropa interior estaba la solución. Ella sabía desde un principio pero sólo acudía allí por una causa desesperada…como ésta.

Así que ese día decidió tomar la cadena de oro de la niña con la medalla de la milagrosa y empeñarla para conseguir el dinero. “Perdóname virgencita pero es para el cumpleaños de Anita, yo te rescato apenas pueda”, le prometió a la virgen en sus oraciones.

Cecilia recibió 230 mil pesos por la cadena y la medalla de la virgen milagrosa. Con eso compró todo lo necesario para que Anita disfrutara su cumpleaños feliz. Al final del día la niña así se lo confirmó. “Mami este fue uno de los mejores cumpleaños de mi vida”. Después de oír esas palabras Cecilia sintió que valió la pena haber acudido a la compraventa y que la virgen era su cómplice en esta aventura por hacer feliz a su hija.

Cuatro meses tendría para rescatarla. Ese es el plazo que establecen los negocios de compraventa para pagar los intereses o retirar el artículo empeñado. En octubre, a Cecilia aún no le alcanzaba para lo uno ni lo otro así que abonó a la deuda y sólo debía reunir 80 mil pesos más para liberar del todo a la Milagrosa.

Pero Cecilia no contaba con que el escándalo de las pirámides en Colombia tocaría el negocio de las compraventas y que por cuenta de la emergencia social y del decreto 4450, ahora ella no sabe cómo ni cuando podrá rescatar a su virgencita.

Por eso a los dos días de la expedición del decreto del Presidente que anuncia cárcel para estos negocios, fue a la compraventa donde dejó a la virgen y la encontró cerrada. Sólo un cartel anunciaba que abrirían sus puertas en enero del 2009 mientras analizan las nuevas medidas adoptadas por el Gobierno.

Es que si fuera una cadena con cualquier otro dije no me diera tan duro, pero saber que es la medalla de la milagrosa la que quedó allá encerrada, me hace sentir muy mal y apenada con los de arriba”, confiesa Cecilia con preocupación.

El decreto busca poner en cintura a unas 20 mil compraventas en todo el país y establece que cuando la usura se dé en pactos de retroventa o en préstamos con cobros periódicos como los llamados 'gota a gota' la sanción será de entre 4 y 10 años de cárcel. Estos establecimientos cobran entre el 5 y el 10% mensual del dinero que entregan a cambio de un artículo y con las nuevas medidas no podrán cobrar más del 2.7%, porcentaje que según los dueños de estos negocios no les permitirá sobrevivir y los obligara al cierre definitivo.

Mientras el gremio que agrupa a los negocios de compraventa Anprocom anuncia que demandará el decreto, con el argumento de que este tipo de contratos existen desde hace 150 años en el código civil y que quienes dependen de esta actividad no pueden convertirse en delincuentes de un día para otro, Cecilia carga ahora una deuda mayor pues siente que le falló a la virgen y esta culpa sin duda ya le empañó su navidad.

Imagínese, ahora no sé cómo sacarla de allí que tal que en enero cuando abran me salgan con que se perdió o que tengo que pagar más, o peor que no reabran”, asegura con angustia esta madre de familia.
Por ahora Cecilia no tiene otra opción que esperar el nuevo año y la reapertura de la compraventa para averiguar por su tesoro empeñado. Y claro, rezar para que la virgen la entienda y en honor a su nombre, le haga el milagrito de esperarla hasta que pueda recuperar su medalla y guardarla en el cajón de su closet. Eso sí lo que ya tiene bien claro es que si la Milagrosa se salva, nunca más pondrá en riesgo su fé por un poco de dinero.
*El nombre del testimonio ha sido cambiado para proteger su identidad.